miércoles, 2 de noviembre de 2016

Las Verduras Salteadas Al Estilo De China. El “Wok”.





Son muchas las comidas que se cocinan con un utensilio específico.
Múltiples cacharros y formas de cocinar con ellos, son importantes para que resultado final sea satisfactorio.
Los encontramos en cualquier cultura y en cualquier latitud.

Con acordarnos del tagin del Magreb, la paella de Valencia, las parrillas Argentinas, los tandoor de  la India, las cestas de bambú chinas y tantos otros, nos hacemos una idea de cómo los invariables de muchas culturas culinarias, gracias a la deriva mediática de nuestros días, han traspasado sus fronteras locales y han llegado a formar parte de la cocina del mundo.
Pero es quizás el denominado wok el que ha logrado una mayor repercusión, debido posiblemente a que es un instrumento práctico y sencillo con el que podemos preparar una comida sana, sin menospreciar la  influencia de la cocina oriental en la forma de comer de Norteamérica, desde donde se ha extendido al resto del mundo, hasta alcanzar un merecido lugar destacado en el olimpo de la cocina.

Cocinar con un wok es tan sencillo como interesante.

La esencia del wok está en su diseño.

Una sartén de metal con las paredes altas y curvas con un fondo cóncavo muy reducido.
La consecuencia de estas características tiene su fundamento cuando además conocemos que el wok esta preparado para cocinar con un fuego vivo, a ser posible con una llama fuerte.

El calor se concentra en la parte baja del wok de forma cóncava, mediante movimientos rítmicos del artefacto vamos cocinando los alimentos sin que lleguen a quemarse, nos ayudan las paredes curvas que no permiten que los alimentos se queden adheridos.




 Nuestro cacharro debe estar además impregnado de aceite desde el primer momento.
Es lo que conocemos como empavonar.
Impregnar el hierro en aceite aún caliente, hasta que el metal quede sellado.
Un proceso de la metalurgia antigua, que tan bien conocían en China y que podemos practicar en nuestros hogares cuando aparezca en nuestra cocina un wok sin estrenar.
Algo tan sencillo nos permite cocinar de forma sana sin apenas materia grasa.


Hoy en día encontramos multitud de artefactos que se inspiran en el wok, incluso encontramos los wok tradicionales, aunque nuestra intendencia domestica nos haga difícil disponer de un fuego vivo con una llama considerable.
Nos se diferencia mucho el wok de las viejas sartenes de hierro donde se ha elaborado mucha de la cocina tradicional de España, Italia o el sur de Francia.



ANTIGUO PEROL DE HIERRO FUNDIDO ESMALTADO.
ORIGINARIO DE ALGODONALES. SIERRA DE CADIZ. ESPAÑA


Para poder apreciar un wok en su plenitud y sus ventajas saludables vamos a cocinar unas verduras.
Una comida sana que puede acompañarnos en nuestras dietas cotidianas.



Delantal.



Usaremos las verduras que tengamos a mano en casa.

En este caso algo de pimiento, cebolla, zanahoria, apio y brócoli. Aunque podéis usar prácticamente cualquier verdura que se os ocurra procurando que este lo más fresca posible.



No es imprescindible disponer del wok, vamos a usar una sartén de fondo pequeño e intentar reproducir la forma de cocción que hemos descrito, un fuego vivo y una cocción rápida con mucho movimiento para que nuestra verdura se vaya cocinando sin llegar a quemarse.
Un aspecto importante es no tapar nuestra preparación en ningún momento para que las verduras no se cuezan con el vapor y mantengan su textura algo tersa.
Como toda cocina oriental la forma de preparar nuestras verduras es bastante importante, cortarla en trozos de tamaño similar para que la cocción se haga de forma homogénea.





Es un proceso que debe hacerse con cierto orden y con algo de paciencia.





Es importante que lo hagáis en el momento de cocinar para que las verduras no pierdan su frescura.






Con nuestras verduras ya cortadas y dispuestas en orden empezamos a cocinar poniendo un fondo de aceite y extendiéndolo bien por nuestro cacharro.
Lo ponemos a fuego fuerte, uno de los secretos de cocinar con el wok es  que debe estar bastante caliente.





Vamos añadiendo las verduras con cierto orden empezamos con la cebolla para que su jugo nos ayude en la cocción de otras verduras.
Seguimos con las zanahorias, el apio y los pimientos, no dejamos de mover nuestros ingredientes, normalmente la técnica del wok requiere mover el cacharro con cierta habilidad, pero podemos sustituir esta danza culinaria moviendo las verduras con algún artefacto de madera.





Por último los brócolis. Dejamos cocinar sin dejar de mover, notaremos que las verduras se van sellando y tomando un tono dorado, no necesita demasiado tiempo es importante que estén algo crujientes.





Podéis añadir algo más de aceite, es importante que no falte pero sin que llegue a ser excesivo.






Para rematar añadimos algo e salsa de soja, no demasiado lo justo para condimentar y aromatizar nuestra comida.


The End.






Es una comida inmediata, aunque se puede tomar algo reposada, incluso permite recalentarse.
Será un magnifico entrante pero también nos permite acompañar cualquier otra comida, desde carnes a pescados, hay muchas posibilidades.


Pero es quizás este plato el adecuado para experimentar con una de las preparaciones más sorprendentes de la cocina oriental.

El tofu. 


El tofu es una comida de origen chino que consiste en el cuajo de los derivados de la semilla de soja, que tiene un cierto proceso de manufacturado mediante el prensado y la utilización de algún coagulante para obtener un preparado compacto que puede recordarnos a los quesos.





Aunque el tofu es originario de China, es la reconocida cocina japonesa responsable de su difusión hacia la cocina del mundo.


Está elaborado exclusivamente con elementos vegetales, sin embargo tiene un alto contenido en proteínas y muy poca grasa. 
Estas características le han dado un lugar privilegiado en las dietas vegetarianas y constituye uno de los paradigmas de comida saludable de la cocina oriental.


Se puede considerar una conserva que se cocina como base de muchos platos ya que su textura le permite absorber con facilidad los condimentos.
No es difícil encontrarlo en tiendas algo especializadas y en algunos casos de bastante calidad.



En esta ocasión para rematar nuestro wok vamos a utilizar un tofu condimentado con aceitunas, aceite de oliva y especies al estilo griego.
Una prueba más del intenso mestizaje intercultural que propicia la cocina.





El tofu debe cocinarse antes de usarse, simplemente hervirlo durante unos 10 minutos hasta conseguir que resulte algo mas consistente y se pueda partir con facilidad.
Partimos el tofu cocinado en trozos regulares no muy grandes, suele venir preparado de forma compacta rectangular.




Utilizamos nuestro wok vacío de verduras pero reservando el jugo. Utilizar algo más de aceite si hiciera falta.





Salteamos los trozos de tofu con la misma técnica anterior hasta que vayan resultando dorados y algo crujientes.
Añadimos las verduras y finalmente salteamos juntos nuestros ingredientes.






The End.


Descubriréis los interesantes sabores de la cocina oriental en vuestras mesas.

Se trata solo de una iniciación.
Es posible que la relación entre vuestra comida habitual con el tofu y el wok llegue a ser apasionante.






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