Habréis visto en muchas de
las recetas de este blog que necesitamos el vapor como fuente de calor para
cocinar los alimentos.
Esta forma de cocinar aporta
muchas ventajas, quizás la mas destacada es que los alimentos no pierden una
parte importante del aporte de vitaminas, minerales y otros nutrientes, como
ocurre con otras formas de cocinar.
Esto se debe
fundamentalmente a dos razones, de un lado los alimentos no se sumergen en agua
y por tanto en su cocción no se disuelven, por otra parte al necesitar una tapadera
la evaporación vuelve a los alimentos.
Se trata en definitiva de una
forma saludable de cocinar.
Pero a parte de esta
interesante característica, los alimentos cocinados al vapor conservan un sabor
más intenso, crean una serie de matices extraordinarios en la mayoría de las
recetas que no serían posibles mediante otro tipo de cocción.
No solo hablamos de
verduras, también se le saca mucho partido a la carne, y por supuesto a los
pescados.
Curiosamente la cocina
tradicional china, suele utilizar este sistema de cocción en platos de pescado
y carne mucho más que en las verduras, que suelen saltearse mediante el popular
wok.
La cocina al vapor es común en
todo el mundo.
Existen múltiples artilugios y formas diferentes para este tipo
de cocción.
Desde las cazuelas
especiales con un recipiente para el agua, su parte intermedia con una rejilla
donde se depositan los alimentos y su tapadera.
Los recipientes orientales
de bambú, colocados sobre una fuente de vapor.
La simple cocción de
verduras de temporada sobre un fondo de agua, que constituye uno de los platos para
la cena de la cocina popular española ya es una forma muy sencilla de cocinar
al vapor.
Toda la gama de aparatos eléctricos
con varios recipientes que permiten hacer una multi-comida.
La propia Lady Thermomix
dispone de su artilugio varoma específico, muy práctico y
eficaz para este tipo de cocina.
Hasta la sencilla olla exprés
en su funcionamiento supone una forma de cocinar al vapor.
En realidad cocinar al vapor
es mucho más sencillo de lo que parece.
No necesitamos ninguna clase
de artilugio sofisticado.
En una fuente de fuego
directa. Con un cacharro con agua, algo intermedio que deje atravesar el
beneficioso vapor, para lo cual nos sirve un simple colador y una tapadera es más
que suficiente.
La tradicional cocción al
vapor en un horno mediante la llamada besuguera ha dado grandes platos a
la historia de la gastronomia.
El moderno cofre de silicona que se introduce en el horno tiene un resultado mas que satisfactorio de cocina al vapor.
Para cantidades grandes de
comida un cacharro de horno con una parrilla y una tapadera improvisada de
papel de aluminio nos pueden servir para hacer un magnifico plato de pescado en
apenas unos minutos.
Os aconsejo probar este método
de cocina.
Ser autodidactas, interpretar
vuestras propias recetas.
Atreveros a probar con
carnes y por supuesto con pescados y mariscos.
Intentar poner una fruta al
vapor, lo que se os ocurra.
Una simple manzana con algo de
azúcar y algún licor rezagado, con un toque de vainilla.
Iréis descubriendo todo un
mundo de matices y formas de cocinar con multitud de ingredientes y aromas que
os van a sorprender.
Yo os iré contando
lo que voy aprendiendo día a día.
Fantástico descubrimiento este blog
ResponderEliminarGracias